
Guía de buenas prácticas para el trabajo seguro de los recicladores de base en tiempos de COVID-19
En el contexto de la emergencia generada por el COVID-19, las autoridades de la mayoría de los países de la región priorizaron en una primera instancia la visión sanitarista en relación a la gestión de residuos, declarando como esencial la recolección y disposición de estos, y dejando transitoriamente en segundo plano -incluso en suspensión- las actividades de recuperación y aprovechamiento de residuos reciclables. Estas actividades implican un mayor nivel de contacto con el material, y ante la incertidumbre sobre los mecanismos de contagio del COVID-19, se presumía que estas actividades podían implicar un mayor riesgo de contagio para los trabajadores.
Todos los miembros de la Iniciativa Regional de Reciclaje Inclusivo compartimos la preocupación y la decisión de priorizar la seguridad y la salud de todos quienes participan de los circuitos de recuperación y recolección diferenciada, comprendiendo que esto haya llevado a la suspensión transitoria de estos programas, hasta tanto existan mayor precisiones y certidumbre sobre las posibilidades de retomar de manera segura el relevante servicio que prestan los recicladores de base y otros actores, en la provisión de materiales para las cadenas de valor que contribuyen a la economía circular.